Me gustan los coches. No tanto los modernos, sino ciertos coches clásicos. Y más en concreto, los coches americanos de los 50, 60 y 70. Me gustan también los coches actuales, pero los de esos años tienen un glamour especial.

Ford Mustang del 67 (fuente: mustangmonthly.com)

Ford Mustang del 67 (fuente: mustangmonthly.com)

Los años dorados del automóvil

Los coches de esos años representan un estilo de vida que aquí no conocimos (ni, viendo cómo están las cosas, conoceremos): unos años en los que había dinero para todo el mundo, con el acceso de muchos trabajadores no cualificados a trabajos bien pagados en las grandes fábricas (tanto de coches como de otros tipos); la gasolina era barata (en los 50 y 60, entre 20 y 30 ¢ de dólar por galón, es decir, entre 5 y 10 ¢ por litro; el salario medio era de 4000$ al año en 1960); y las carreteras, eternas (la Ruta 20 son unos 5400km de largo; la famosa Ruta 66 eran casi 4000km). Añádase a esto unas ciudades en las que lo normal era construir a lo ancho, con casas unifamiliares, ocupando muchos kilómetros cuadrados, y no sorprender que la industria automovilística viviera sus mejores años.

Los "Dagmar Bumpers", típicos en los 50 (fuente: hemmings.com)

Los "Dagmar Bumpers", típicos en los 50 (fuente: hemmings.com)

La economía americana despegó después de la segunda guerra mundial, y los coches reflejaron la actitud y la exuberancia de esos años. La “época espacial” marcó los coches de los años 50, que incorporaron adornos más propios de cohetes que de vehículos terrestres; los 60 vieron el nacimiento del mercado para jóvenes, con la aparición de los muscle cars; los 70, aunque fueron años de crisis económica y social (la resaca de la “edad hippy”, la guerra de Vietnam, la crisis del petróleo), fueron el canto del cisne de una industria que en los 80 cayó víctima de su gran enemigo: los coches japoneses.

Cars, la película

Hace unos meses echaron “Cars” en la TV por enésima vez. Y por enésima vez, aunque pensé en cambiar de canal a los diez segundos, me quedé a ver toda la película.

“Cars” es mucho más que una película de dibujos animados para niños. Como las grandes películas de Pixar (“Bichos”, “Toy Story”, “Monstruos S. A.”, etc.), ellos son el público principal; pero también hay muchos elementos que sólo “los mayores” sabremos apreciar. No tanto aquí como en los EEUU, donde todas las referencias a aquellos gloriosos años de esplendor del automóvil cobran vida. La NASCAR, la Ruta 66, los low riders latinos (el personaje de Ramón), el Hudson Hornet … Todo está ahí. Un tratado de historia del automóvil americano en una película de dibujos animados.

 Bring a Trailer

Y todo esto viene a cuento de un sitio web llamado Bring a Trailer. Se dedican a buscar las mejores ofertas de coches vintage en la Red, y hacen features sobre ellas. Muchos que venden un coche de este tipo ven que llueven las ofertas a partir de su aparición en BaT. Para cada coche se incluye alguna foto, a veces algún vídeo, una descripción (incluyendo comentarios sobre su estado, a partir de las fotos y/o de lo que aparezca en la oferta), y alguna otra cosa relacionada.

No tengo pensado comprar ningún coche vintage en los EEUU, pero me gusta seguir este sitio web por los coches que aparecen en él. Hay de todo: desde modelos Ford T de los años 20 y 30, hasta coches europeos (que allí son exóticos, pero aquí pueden ser de lo más normal). Y por supuesto, mi fetiche particular: esos preciosos, gigantes, exagerados, carísimos de mantener, difíciles de conducir y posiblemente muy poco seguros coches de los 50, 60 y 70.

Como es un tema que me gusta y quiero darle algo más de contenido al weblog, voy a intentar mencionar cada semana un coche que me haya gustado de los que salen en BaT. Haré poco más que un resumen y traducción de los artículos que salgan allí. Mi intención es que me lleve menos de una hora, y mejor todavía menos de media. Así podré hacer dos o tres juntas y programarlas para que salgan un día de la semana.

Inicialmente (y pendiente de que me den permiso los de BaT, que nunca se sabe), intentaré que sea todos los lunes, para alegrar un poco la incorporación al trabajo. Estén atentos a su lector RSS.